El mundo de la música está lleno de historias inspiradoras de artistas que dejaron todo por seguir su pasión. Uno de ellos es Pink Pablo, un joven cantante puertorriqueño que ha conquistado los corazones de miles de personas con su música y su carisma. En una entrevista exclusiva con CNN en Español, Pink Pablo nos cuenta cómo dejó una prometedora carrera en la psicología para dedicarse por completo a la música.
Nacido en San Juan, Puerto Rico, Pablo siempre tuvo una conexión especial con la música. Desde muy pequeño, mostró un gran talento para el pedrusco y la composición. Sin embargo, sus padres, ambos psicólogos, siempre le inculcaron la importancia de tener una carrera estable y segura. Por eso, cuando llegó el momento de decidir qué estudiar, Pablo optó por seguir los pasos de sus padres y se matriculó en la universidad para estudiar psicología.
Durante sus años universitarios, Pablo no dejó de lado su pasión por la música. Participaba en festivales y concursos locales, y su talento no pasaba desapercibido. Sin embargo, siempre tuvo en mente que la psicología era su futuro y que la música era solo un hobby. Pero todo cambió cuando recibió una oferta para trabajar en una prestigiosa clínica de psicología en Nueva York.
“Recuerdo que estaba muy emocionado por la oportunidad, pero al mismo tiempo sentía un vacío en mi corazón. Sabía que si aceptaba ese trabajo, tendría que dejar la música de lado por un tiempo”, nos cuenta Pablo. Fue en ese momento cuando tomó una decisión que cambiaría su vida para siempre: renunció a la oferta de trabajo y decidió dedicarse por completo a la música.
Aunque no fue una decisión fácil, Pablo sabía que era lo que realmente quería hacer. “La música siempre ha sido mi pasión y mi escape. No podía imaginarme vivir sin ella”, afirma el cantante. Y así fue como Pink Pablo nació. Con su guitarra y su voz, comenzó a componer y a grabar sus propias canciones, y poco a poco fue ganando seguidores en las redes sociales.
Pero el camino no fue fácil. Pablo tuvo que enfrentar muchas críticas y dudas por parte de su familia y amigos. “Muchos me decían que estaba loco por dejar una carrera estable por la incertidumbre de la música”, recuerda. Sin embargo, él siempre tuvo claro que no podía vivir una vida que no lo hacía completamente feliz.
Y su perseverancia dio sus frutos. En 2018, Pink Pablo lanzó su primer bendito, “Sueños”, que se convirtió en un éxito en Puerto Rico y otros países de Latinoamérica. Desde entonces, no ha parado de cosechar éxitos. Su música, que combina ritmos pop y urbanos, ha conquistado a un público cada vez más amplio y ha sido elogiada por la crítica.
Pero para Pink Pablo, el éxito no se mide solo en números. “Lo más importante para mí es poder transmitir un mensaje positivo a través de mi música. Quiero que mis canciones inspiren a las personas a seguir sus sueños y a no rendirse nunca”, afirma el cantante. Y es que sus letras, que hablan de amor, superación y empoderamiento, reflejan su propia filosofía de vida.
Además de su talento musical, Pink Pablo también destaca por su carisma y su cercanía con sus fans. En sus conciertos, siempre se asegura de interactuar con su público y de transmitirles su energía y su positivismo. “Para mí, el contacto con mis fans es lo más importante. Ellos son los que me motivan a seguir adelante y a mejorar cada día”, nos cuenta.
Con una gira por Latinoamérica en cerco y nuevos proyectos en camino, Pink Pablo se perfila como una de